Comulgar sin gluten

Descripción

Existen muchas razones por las cuales las personas pueden decidir comulgar sin gluten. Algunas personas pueden tener alergias al gluten, otras pueden tener enfermedades celiacas, y otras pueden hacerlo por una elección personal. No importa la razón, siempre existen muchas maneras de acceder a la comunión sin gluten.

La Iglesia católica en los Estados Unidos ha establecido protocolos para el ministerio de la comunión a las personas con enfermedades celiacas. Estos protocolos se han establecido para asegurar que todos los fieles católicos puedan participar plenamente en la vida de la Iglesia. Si usted está interesado en obtener más información sobre cómo recibir la comunión sin gluten en su parroquia, póngase en contacto con su oficina de pastoral.

Beneficios del alimento

El gluten es una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno. Algunas personas son sensibles al gluten y pueden tener síntomas como dolor de estómago, diarrea, ardor de estómago y náuseas después de comer productos que lo contienen. Comer sin gluten puede ayudar a aliviar estos síntomas.

La dieta sin gluten también puede ser beneficiosa para las personas con diabetes, ya que puede ayudar a controlar el nivel de azúcar en sangre. También se ha demostrado que la dieta sin gluten puede mejorar la salud del corazón y reducir el riesgo de enfermedad celíaca.

¿Qué se puede cocinar?

Podés prepararte un sándwich con jamón crudo, queso y tomate. O bien, podés hacerte una ensalada con lechuga, atún y mayonesa. También se puede comer arroz con leche o bien, un yogur.

Ingredientes

Necesitarías una consulta para un dietista-nutricionista para poder cantarle con certeza las calorías, grasas y el valor energético de "comulgar sin gluten". No obstante, si buscamos en internet, calculadoras de nutrición o aplicaciones móviles, te podría decir el perfil nutricional de algunos alimentos "sin gluten".

¿Cómo preparar?

Primero, consigue unhostia sin gluten. Puedes comprarlas en línea, en tiendas especializadas o en algunos supermercados.

Una vez que tengas las hostias, llena una cuchara con agua. Luego, coloca la hostia en el agua.

Después de unos segundos, retira la hostia del agua. Deja que se escurra el exceso de agua.

A continuación, coloca la hostia en tu mano izquierda. Toma un poco de agua en tu mano derecha y bendícete con ella.

Luego, pon la hostia en tu boca y come. Bebe un poco de agua después.